Destaca en el desfiladero su estratégico puente, del siglo XII aunque reconstruido a partir de 1586, cuando una gran riada se llevó a su paso el puente y el pueblo, incluido un hospital de peregrinos fundado por Alfonso VII (1144).
En el núcleo de la población se conserva la iglesia románica de San Juan, probablemente vinculada al hospital de peregrinos que se llevó la riada. Vemos su origen románico en la arquivolta de la portada, el arco y algunos canecillos, pero el resto fue reconstruido en el siglo XVIII.