Vía Augusta fue la denominación que recibieron diversas calzadas en tiempos romanos, entre ellas este camino. Partiendo de Cádiz, pasaba por Sevilla, Córdoba, Valencia, Sagunto, Tarragona, cruzaba los Pirineos, recorría la Costa Azul francesa, Los Alpes, entraba en Italia y llegaba hasta la capital del Imperio. Se trataba de una ruta imprescindible para emprender, desde la capital gaditana, cualquier recorrido en dirección Norte, lo que también incluía al Camino de Santiago.
Fotos: Jorge Martínez-Cava.
Esta ruta jacobea ha sido recuperada para enlazar con la Vía de la Plata, aunque se ha ido adaptando a la situación actual de los caminos y carreteras.
El peregrino parte de la iglesia de Santiago en Cádiz y se dirige, por San Fernando y Puerto Real, a El Puerto de Santa María y Jerez. Entra en la provincia de Sevilla por El Cuervo, Lebrija, Las Cabezas de San Juan y Utrera. Desde allí puede dirigirse a Alcalá de Guadaíra o a Dos Hermanas, por la llamada variante nazarena, para alcanzar finalmente Sevilla.
Este camino permite contemplar la preciosa bahía de Cádiz y, tras peregrinar por interesantes zonas rurales, conduce al caminante hasta la imponente Sevilla con su Giralda, su Alcázar, su Archivo de Indias y su Torre del Oro.
La ruta fue recuperada y señalizada en 2006 por la Asociación de Amigos del Camino de Santiago en Cádiz y se encuentra perfectamente indicada con flechas amarillas. En todo el trazado existen localidades con servicios para hacer más sencillo el peregrinaje.