Entre julio y agosto, a los responsables del alojamiento municipal, que gestiona la Asociación Asturleonesa de Amigos del Camino de Santiago, no les ha quedado más remedio que decir que no a 309 personas, que han tenido que darse media vuelta y buscarse la vida en otra parte. No hay capacidad para que crezca el número de peregrinos. La media de peregrinos acogidos ha sido de 20,2 para un refugio… de 18 plazas.